Interviews
Maurice Lacroix empezó a producir sus propios relojes a mediados de los setenta, en una época de revoluciones y cambios profundos, de libertades y conquistas. Aunque en un principio se dedicaban a la elaboración de relojes de “marca blanca”, decidieron empezar a crear su propio sendero, y pusieron su nombre en un reloj por vez primera en 1975 con la mirada en un solo objetivo: crear relojes de la más alta calidad, con materiales innovadores y un excelente diseño que ofreciera un gran valor a los ojos de sus clientes, es decir, que los beneficios de obtenerlo, así como su atractivo, saltaran a la vista. Todo sin ser necesariamente un producto muy costoso.