Salones
La lectura del tiempo es, en sí misma, una práctica contemplativa. El tiempo puede apreciarse de distintas formas, desde la premura, o desde el simple placer de sentir el tic tac. Mejor aún, si el…
La lectura del tiempo es, en sí misma, una práctica contemplativa. El tiempo puede apreciarse de distintas formas, desde la premura, o desde el simple placer de sentir el tic tac. Mejor aún, si el…