Mido Commander Gradient Catrines, una explosión de tradición y color

El Día de Muertos es mucho más que una fecha en el calendario: es un puente entre la memoria y la vida, una celebración luminosa donde el recuerdo se convierte en fiesta. Con esa esencia, Mido presenta la sexta edición de su homenaje a México: el Commander Gradient Catrines Edición Especial, una pieza que une la maestría relojera suiza con el alma vibrante de una de las tradiciones más icónicas del país.

Este modelo, que durante años fue reservado exclusivamente para el mercado mexicano, ahora da un salto internacional. La edición 2025 responde al entusiasmo de coleccionistas y amantes de la relojería de todo el mundo, quienes ven en esta creación un símbolo cultural convertido en arte mecánico.

Un lienzo vivo en la muñeca

El corazón de esta edición especial es su carátula acrílica degradada, que se transforma en un auténtico lienzo viviente. En el centro, transparente, deja entrever el movimiento interno; hacia los bordes, un degradado negro enmarca a un Catrín festivo, rodeado de flores y colores. La figura, realizada con diez lacas diferentes, se ilumina por la noche gracias a la tecnología Super-LumiNova, revelando tonos azules y verdes que recuerdan a la magia de las ofrendas encendidas por veladoras.

Los índices pulidos, decorados con ranuras en púrpura, turquesa, amarillo o azul oscuro, así como las manecillas facetadas y diamantadas, también cobran vida con la luz nocturna. Un espectáculo que cambia del día a la noche, como la misma celebración mexicana.

Tradición e innovación en equilibrio

El Commander Gradient Catrines conserva el ADN de la colección que Mido produce sin interrupción desde 1959. Bajo su carátula late el Calibre 80, un movimiento automático suizo con hasta 80 horas de reserva de marcha y espiral Nivachron, resistente a campos magnéticos y golpes. Una pieza pensada no solo para admirarse, sino para acompañar el día a día con precisión y fiabilidad.

La caja de acero inoxidable con acabado satinado se realza con un bisel pulido y tres correas intercambiables: acero satinado, piel negra con pespuntes azules y caucho texturizado en naranja, evocando a la flor de cempasúchil. Cada detalle habla de tradición y versatilidad.

Un tributo a la identidad mexicana

Más que un reloj, esta edición limitada es un tributo cultural. Desde 2020, Mido ha convertido al Día de Muertos en una fuente de inspiración, y este año reafirma ese compromiso con un diseño que celebra la vida a través de los recuerdos.

El Commander Gradient Catrines no solo mide el tiempo, también lo honra. Es una invitación a llevar en la muñeca un fragmento de México, iluminado por colores que evocan la alegría de quienes nunca se van del todo.

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