Perpetual Moon 38 Aventurine Edition de Arnold & Son: lujo y poesía lunar en la muñeca

Algunas piezas de alta relojería parecen guardar un secreto: no solo cuentan el tiempo, lo convierten en emoción. El Perpetual Moon 38 White Gold, Aventurine Edition de Arnold & Son es precisamente eso, un reloj que transforma la astronomía en poesía y la precisión en arte.

A primera vista, este reloj fascina. Bajo la luz del día, su caja de oro gris pulido y su carátula de cristal de aventurina azul revelan una elegancia etérea, pero al caer la noche, el espectáculo se transforma: la Luna de nácar luminiscente y las constelaciones de la Osa Mayor y Casiopea, pintadas a mano, despiertan con un resplandor hipnótico.

Un cielo en la muñeca

La carátula del Perpetual Moon 38 está literalmente salpicada de estrellas. Los destellos metálicos incrustados en la aventurina evocan un firmamento nocturno en miniatura. En el centro, la gran Luna astronómica domina la escena con delicadeza, enmarcada por constelaciones que desde tiempos antiguos han servido de guía a los navegantes. Este guiño no es casual: John Arnold, fundador de la marca, fue un pionero de la cronometría marina.

El bisel, las asas y la hebilla se engalanan con diamantes de talla brillante, mientras que los índices aplicados lucen diamantes de talla marquesa, sumando en total 2.66 quilates. El resultado es un resplandor deslumbrante, capaz de atrapar la mirada desde cualquier ángulo.

Mecánica pensada para la mujer

Aunque el diseño de este reloj transmite un aura de joya preciosa, su interior late con la misma exigencia técnica que caracteriza a toda la relojería de Arnold & Son. En su corazón se encuentra el calibre A&S1612, un movimiento manual desarrollado especialmente para este modelo femenino. Con un diámetro de 30 mm, se ajusta perfectamente a la caja de 38 mm y apenas supera los 10 mm de grosor.

Este movimiento no solo es bello, también es robusto: ofrece 90 horas de reserva de marcha, lo que significa casi cuatro días de autonomía sin necesidad de dar cuerda. Su complicación de fases lunares es de una precisión extraordinaria: acumula apenas un día de desfase en 122 años de funcionamiento ininterrumpido. Un detalle que habla de la obsesión de la marca por la exactitud astronómica.

De día y de noche

La magia del Perpetual Moon 38 White Gold, Aventurine Edition está en su dualidad. De día, su elegancia discreta convierte al reloj en una pieza refinada y versátil. De noche, el Super-LumiNova revela un espectáculo secreto: un azul frío que ilumina la Luna y las constelaciones, mientras los diamantes reflejan destellos como si fueran estrellas fugaces.

Con tan solo 18 ejemplares en edición limitada, esta pieza se convierte en un tesoro exclusivo para las coleccionistas que buscan algo más que un accesorio: un fragmento de cielo encapsulado en oro y diamantes.

Arnold & Son reafirma con esta creación que la alta relojería femenina no es una adaptación de los modelos masculinos, sino un universo propio donde el arte, la técnica y la poesía se funden en perfecta armonía.

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