
Turbine Erotic de Perrelet o el arte del erotismo: explícito, pero no tanto
La centenaria tradición de los relojes eróticos es perpetuada por Perrelet con cuatro ediciones limitadas Turbine Erotic, con carátulas inferiores decoradas con ilustraciones estilo manga hentai, “censuradas” por la turbina. Relojes eróticos: una tradición centenaria…
La centenaria tradición de los relojes eróticos es perpetuada por Perrelet con cuatro ediciones limitadas Turbine Erotic, con carátulas inferiores decoradas con ilustraciones estilo manga hentai, “censuradas” por la turbina.
Relojes eróticos: una tradición centenaria
La historia de los relojes eróticos se remonta al siglo XVII. Habiendo sido creados primero para el mercado oriental, pronto ganaron popularidad entre los coleccionistas del mercado europeo. Si bien al comienzo se decoraron con esmaltes o grabados en oro, hacia la mitad del siglo XVIII, con la aparición de los relojes autómatas, las escenas pudieron animarse, volviéndose en muchas ocasiones, como era de esperarse, más realistas y licenciosas.
Actualmente, distintas casas relojeras aún producen este tipo de relojes bajo encargo, sin hacer publicidad de ello. No obstante, Perrelet es la excepción, incluyendo relojes eróticos en su colección, declarando abiertamente su producción y haciendo promoción de la misma.
Turbine Erotic: el arte de jugar con lo explícito y lo censurado
Así, arraigados en esta centenaria tradición de los relojes eróticos, y tras él éxito de dos ediciones limitadas lanzadas en 2022, Perrelet estrena cuatro nuevas ediciones Turbine Erotic, limitadas a 99 piezas cada una, cuyas subcarátulas están decoradas con dibujos de una pareja íntima, en tonos grises, animados con detalles en color rojo, ilustrados en estilo manga hentai, los cuales deben considerarse, a todos los efectos, como una expresión artística.
Los cuatro comparten un diseño sobrio y misterioso en color negro, con las 12 aspas de la turbina escondiendo las ilustraciones eróticas, las que son reveladas cuando el movimiento de la muñeca hace girar rápidamente la turbina, que hace las veces de un telón que, de cierta manera, y muy acorde con el juego del arte erótico, “censura” la escena. Hecha en aluminio anodizado negro, la turbina se equilibra por debajo con contrapesos de tungsteno que le permiten responder al más mínimo movimiento de la muñeca, dejando entrever la escena.




Una obra de arte, tanto en el exterior, como en el interior
En el interior de la caja de 41 milímetros de diámetro, hecha en titanio grado 2 con recubrimiento DLC negro, y que posee una hermeticidad de 100 metros, late, como en muchos de los modelos Turbine, el confiable movimiento automático de fabricación propia, el calibre P-331-MH, desarrollado por SOPROD, empresa hermana de Perrelet. El movimiento, que cuenta con una reserva de marcha de 42 horas, oscila a una frecuencia de 28,800 alternancias por hora (4 Hz) y cuenta con la certificación de cronómetro COSC y Chronofiable®.

El movimiento, decorado según los cánones de la mejor tradición relojera, incluyendo la placa y los puentes chapados en rodio y con granulado circular, así como la masa oscilante calada y chapada en rodio, decorada con el logotipo de la Maison, puede verse a través del fondo de caja transparente.

En línea con el estilo de la colección Turbine, los nuevos Turbine Erotic cuentan con una caja estriada, una corona adornada con la letra “P” del logotipo, así como un bisel plano que enmarca el reborde sobre el que se encuentran los tradicionales números arábigos alternados con los índices en forma de bastón, recubiertos con Super-LumiNova para una máxima legibilidad, al igual que las manecillas de horas y minutos, mientras que la manecilla de los segundos destaca por su audaz color rojo.

Elegantes y al tiempo atrevidos, los relojes Turbine Erotic se portan en la muñeca mediante una correa de caucho negro que cuenta con una hebilla de titanio DLC grado 2 de color negro, decorada con el logotipo de Perrelet.

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Cristian Miguez
De familia de relojeros, el amor por la alta relojería lo traigo en la sangre, y si bien en la mente juego con las letras, las ciencias y el marketing, en una mano traigo una pluma y en la otra, una espada.
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